En Murcia el proceso de aprobación de los presupuestos regionales ni siquiera ha comenzado, pero el futuro de las cuentas para 2025 pasa necesariamente por el apoyo de VOX. Y su presidente regional, José Ángel Antelo, ha dejado muy claro, en declaraciones a Onda Regional, que la posición del ejecutivo murciano en el asunto del reparto de menores migrantes no acompañados, es una línea roja de la que no están dispuestos a moverse.Antelo es taxativo en este asunto: VOX abandonó antes de verano el pacto de gobierno porque Murcia decidió aceptar a un pequeño grupo de menores migrantes no acompañados cuyo reparto estaba pactado desde hacía mucho tiempo y ahora está igualmente dispuesto a votar en contra de los presupuestos regionales para el año que viene. No transigirán con lo que, en su opinión, es un gesto de colaboración con la inmigración irregular.La puerta que Antelo deja abierta es que el gobierno murciano se niegue a aceptar el acuerdo que el PP pueda cerrar a nivel nacional (posibilidad muy remota, si consideramos que el acuerdo establece precisamente un reparto obligatorio). Dice, además, que no hay ninguna negociación en marcha con el PP para sacar adelante las cuentas. Asegura Antelo que lo que no puede descartar es que los populares traten de salvar la situación pactando con el PSOE. No descarta tampoco que esta estrategia pueda extenderse a aquellos ayuntamientos en los que el PP gobierna en minoría. Todo dependerá de que de las cuentas municipales hagan desaparecer las ayudas públicas a las ONG's a las que VOX acusa de colaborar con la inmigración irregular. El ejemplo a seguir, dice, es el de Molina de Segura.Preguntado el gobierno regional por este asunto, la respuesta es que «no hay nada que decir» y que, en cualquier caso, los apoyos a los presupuestos deben negociarse entre los grupos parlamentarios.
