Hemos pedido opinión a dos politólogos de la Universidad de Murcia, José Carlos Losada y Fernando Jiménez, sobre la manera en que las administraciones han gestionado esta crisis y la estrategia del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, frente a las crítica recibidas. Les hemos preguntado por separado, pero su respuesta es extraordinariamente coincidente.Sí, porque los dos eligen el mismo término para definir la respuesta tanto de la Generalitat Valenciana como del Gobierno central: ha sido, nos dicen, un completo desastre.En opinión de José Carlos Losada, un ejemplo palmario de esa desastrosa gestión es el hecho de que no haya habido hasta ahora una comparecencia pública para explicar las decisiones que se tomaron, ni quién o cuándo las adoptó. Va, nos dice, en contra de cualquier manual de gestión de crisis y da la sensación de que se está tratando de ganar tiempo para construir un relato que permita justificar los pasos dados.Fernando Jiménez va un paso más allá: en su opinión, el problema de fondo radica en un debate que ningún partido político quiere abrir y no es otro que la excesiva politización de todas las administraciones españolas. Jiménez cree que deberíamos seguir el ejemplo de otros países de nuestro entorno, en los que los políticos sólo ocupan los primeros escalones del sistema, pero no contaminan aquellos niveles en los que la decisión debe ser estrictamente técnica.Nuestros dos expertos coinciden plenamente en otro asunto: al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, no le va a servir con «sacrificar algunos peones» para mantenerse en su cargo. Si hubiera que cortar alguna cabeza, nos dicen, la primera en caer debería ser la suya.