ALFONSO MARTÍNEZ. LorcaLorca ya cuenta con el proyecto para la implantación de la Zona de Bajas Emisiones. Se van a instalar 22 cámaras de lectura de matrículas, aunque el documento no prevé sanciones y ni prohibiciones. El proyecto se aplicará en dos zonas del centro de la ciudad, por una parte, el casco histórico y por otra la zona residencial en la que se ubica el hospital Virgen del Alcázar.Previo a la redacción del proyecto el consistorio ha medido la calidad del aire del casco urbano que, según la edil de urbanismo y Medio Ambiente, María Hernández, «Lorca cumple con la legislación ambiental nacional y europea, estando dentro de los valores permitidos». Estos indicadores habilitan al Ayuntamiento para desarrollar un modelo de Zona de Bajas Emisiones «no restrictivo y sin medidas sancionadoras». Entre las actuaciones, que ya se están aplicando, están el incremento de los carriles bici, el calmado de tráfico y un parking disuasorio, que estará finalizado en verano.Además, se van a instalar 22 cámaras de lectura de matrículas que, según María Hernández, «no se van a utilizar para sancionar, aunque la policía local las va a incorporar a su dispositivo para mejorar la seguridad ciudadana».