Recorremos una y otra vez las calles y plazas de nuestra ciudad sin prestar atención. Pasamos por alto placas, estatuas y edificios, dando por hecho que ya los conocemos y que no tienen nada nuevo que contarnos. Y de pronto un día viajamos a otra ciudad y todo es nuevo, desconocido e interesante. Los responsables de esta brujería son los guías de turismo, esas personitas que se empapan de fechas, batallas, nombres y cotilleos ancestrales para que nosotros, turistas con mucha prisa y preocupados por el siguiente story nos quedemos con la boca abierta en cada esquina. Hoy tenemos en nuestra mesa a Inma Pérez, guía oficial, que viene a contarnos cómo es el día a día en esta profesión.